¿No os ha pasado alguna vez que, encontrándote con antiguos amigos, vuelven a aparecer en ti actitudes y formas de actuar que pensabas que habías cambiado?
Así que durante la semana fallera, hemos salido juntas a tomar algo, hacer una torra y a festear.
Durante todo ese tiempo, me he dado cuenta de que han surgido en mi comportamientos y actitudes, pensamientos... que hacia cuando salía con ellas y que ahora, en mi vida actual, ya no hago. Alguna de esas cosas, va en contra de mi ideología actual, pero al envolverme con ese entorno, volvieron a surgir y era como haber vuelto a los quince años.
Una vez vuelto a la normalidad, me siento extraña. No me gusta tener esa sensación de perder todo lo que he ganado desde entonces. Pienso que he cambiado mucho desde los quince años y volver a vivir cosas así, me hace tener una insatisfacción grande mi misma.
Durante la carrera y las prácticas, he visto lo importante que es el entorno para una persona. Es necesario muchas veces, que una persona cambie su entorno para mejorar su vida y no volver a lo mismo de antes. Pero, hasta ahora, no había entendido muy bien ese significado. Ahora me doy cuenta que una persona puede volver a caer en el pasado. Lo que a mí me ha sucedido, es algo sin mucha importancia. Pero me da a pensar que ¿y esas personas que quieren salir de una drogadicción pero les cuesta hacerlo por culpa de la influencia de su entorno? ¿Y las personas que necesitan otro grupo de iguales diferente al que tienen para poder salir de algún problema grave?
No olvidar el pasado porque será la única forma de que construyas un buen futuro.
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